El café es una de las bebidas que más se consumen en Estados Unidos y Europa. De hecho, cada ciudadano del mundo consume de media 1,3 kilogramos de café al año. Por tanto, no es extraño que existan tantas máquinas de cafe en casas y bares, máquinas vending de café en metros y hospitales o máquinas de café en la oficina.
Y es así por muchos motivos, pero quizás algunos de los más importantes residen en sus beneficios para la salud. Tiene muchos, pero hay cinco principales razones que hacen que beber café, siempre en dosis adecuadas, sea recomendado.
En primer lugar, la cafeína aumenta la adrenalina, es decir, incrementa nuestro combustible para el desarrollo de ejercicio físico, lo que es altamente necesario, sobre todo, para aquellos que practican algún tipo de deporte.
Asimismo, el café es una de las pocas sustancias naturales que nos ayuda a quemar grasas, por lo que no es incompatible con las dietas, sino, al contrario, bueno para adelgazar. Eso sí, en su justa medida. Si tomamos grandes cantidades el efecto desaparece. El café es, pues, un buen complemento a una dieta sana y equilibrada.
Es, además, antioxidante y los antioxidantes pueden ser una protección efectiva y eficaz para prevenir el envejecimiento prematuro y enfermedades crónico degenerativas. En cuarto lugar, distintos estudios en humanos demuestran que el café mejora varios aspectos de la función cerebral. Fundamentalmente, nos mantiene en alerta.
Y, según un estudio desarrollado en la prestigiosa universidad de Harvard, el riesgo de caer en depresión se reduce al incrementar el consumo de esta bebida. El trabajo señalaba que, al menos en el caso de las mujeres, quienes bebieron cuatro o más tazas de café desarrollaron la depresión en un 20% menos de casos.
El café aporta muchos beneficios siempre que se consuma de manera equilibrada y siempre que sea café, café, es decir, con cafeína.